Medio Ambiente
Se seca otra presa por la sequía
En apenas un año la conocida como presa de Silva en el municipio de Romita, pasó de su casi total recuperación tras la muerte de cientos de peces, a convertirse en un desolador paisaje al haber perdido la última gota de agua.
Y es que, en septiembre de 2019, cientos o quizás miles de estos animales se observaban inertes a la orilla del embalse, presuntamente a consecuencia de los químicos utilizados en los plantíos de agave.
Al tratarse de una fuente de ingresos económicos para quienes forman parte el Ejido Emiliano Zapata, semanas después autoridades estatales y municipales sembraron 41 mil ejemplares de tilapia y bagre, con los que se beneficiaría a 87 familias de las comunidades de Silva, y las Gavias I y II.
Casi tres años después, en marzo de 2023, el ejidatario Agustín Arrona Cisneros -de entonces 73 años- relataba que el cuerpo de agua ya existía desde que era un niño, y destacaba que primero fue utilizado para el riego agrícola, pero que luego se convirtió en un sitio de esparcimiento que atraía a cientos de personas durante la Semana Santa.
Hoy el escenario es completamente diferente. Unos pocos insectos son los que, con el sol puesto en lo más alto, recorren los agrietamientos provocados por la deshidratación del suelo.
Mientras caminan por el pequeño bordo que divide el embalse, madre e hija relatan que durante la Semana Santa éste se secó por completo, pero que el área más alta se quedó sin agua semanas antes.
Las paredes del calicanto ya no se esconden tras las enormes cantidades de agua que se acumulaban por los escurrimientos de los cerros cercanos, frente a la temporada de lluvias. El año pasado las precipitaciones pluviales fueron tan escasas que no lograron llenar el embalse y, en consecuencia, acabaron la poca vida que tenía el lugar.
Tampoco han presencia de patos y otras aves que bebían en el lugar. Del paradero de los peces, se desconoce si fueron reubicados o si permanecen sepultados bajo la tierra agrietada que, a cinco centímetros de profundidad, se mantiene semi húmeda al tacto.
Se mantienen las actividades deportivas, pero, ya en el centro del terreno, mientras que los juncos y otras especies vegetales luchan por sobrevivir.
Presas están completamente secas en Guanajuato
La presa de la comunidad de Cañada de Negros, en el municipio de Purísima del Rincón, ha reducido su nivel, y las áreas verdes de sus alrededores se han estado secando más. En el lugar se puede ver como las áreas verdes se han secado, y los árboles se encuentran también en las mismas condiciones.
La zona donde se encuentra esta presa, ha destacado para el turismo del municipio, pues suele recibir visitas, por el paisaje que muestra. Además, es un espacio donde animales del ganado acuden continuamente a tomar agua para su desarrollo.
Por otro lado, la presa del Palote, en el Parque Metropolitano, se secó. Mismos ciudadanos compartieron fotografías mostrando como luce lo que era un cuerpo de agua y ahora se puede caminar por ahí como si fuera un terreno más.
De acuerdo con el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de León (Sapal), el nivel actual de la Presa del Palote, es del 1.34%, con un almacenamiento, con 129, 402. 45 m3 y a 1, 830. 53 metros sobre el nivel del mar (msnm).
Nunca antes se había secado así la Presa del Palote, se registraban niveles bajos hasta del 20% de capacidad, pero no bajaba como hasta ahora, prácticamente sin nada de líquido.
Otro caso es el de la presa ‘El Carbajal’ se encuentra seca en su totalidad, situación que preocupa a habitantes de la comunidad del mismo nombre, pues desde hace más de 60 años no se presentaba una situación similar.
Cabe hacer mención que, dicho embalse se encuentra en una de las orillas de la comunidad del mismo nombre, la cual, es colindante con el municipio de Tierra Blanca, de la cual, diversos habitantes y principalmente agricultores y ganaderos se surtían del vital líquido.
Asimismo, en el suroeste de Guanajuato, la situación de sequía se agrava día a día, afectando no solo a sus presas, sino también al sector agrícola. Las presas de la región muestran niveles alarmantemente bajos, lo que genera preocupación entre las autoridades y los habitantes locales.
Esta sequía impacta de manera directa en la producción agrícola, dejando a los agricultores en una situación precaria, con cultivos marchitos y pérdidas económicas significativas.
Ante esta crisis, se hace imperativo implementar medidas de conservación del agua y buscar soluciones sostenibles para mitigar los efectos devastadores de la sequía en esta importante región agrícola de Guanajuato.