Guanajuato ha gastado 400 mdp en 4 años en personas baleadas

De acuerdo a datos de la Secretaría de Salud del estado de Guanajuato cada día se atienden a 4 lesionados por arma de fuego, uno cada 8 horas, dando un total en lo que va del sexenio de 7 mil 638 pacientes baleados.

La atención a personas heridas por arma de fuego es un problema de salud grave que requiere atención médica especializada, además de generar un costo importante al sistema de salud pues de acuerdo a fuentes médicas ajenas a la dependencia estatal consultadas por MILENIO el costo por atención de éstos pacientes rondaría alrededor de los 60 mil pesos contando honorarios de los médicos, insumos requeridos para su tratamiento y el uso de instalaciones.

De ser correcta la apreciación, aunque se nos aclara que es difícil estimar un promedio ello implicaría que la atención de estos pacientes generaría un gasto aproximado de 458 millones de pesos, que de no existir este tipo de lesiones ese dinero podría utilizarse para atender otro tipo de problemas de salud.

“El problema es que algunas veces se tienen que detener atenciones a pacientes por ejemplo que requieren de una cirugía algunas veces no grave porque de pronto te llega un lesionado por arma de fuego y no le puedes negar la atención” aseguró un médico de urgencias consultado por este medio.

Para dimensionar dicho gasto y lo que se podría hacer con el recurso para atender heridos de bala representa al año 91 millones de pesos en promedios 21 millones de pesos más de lo que el Sistema de Salud Gto. invierte al año para el tratamiento de niños con enfermedades raras.

Son los hospitales del Sistema de Salud de León con 1 mil 965, Irapuato con 1 mil 176 y Silao De La Victoria con 336 los que han atendido a la mayor cantidad de pacientes lesionados por armas de fuego.

Para los médicos urgenciólogos las atenciones por heridos de bala han venido a la alza de manera constante agregando una variable, que en muchos de los casos son amenazados por grupos delincuenciales para que atiendan a los lesionados.

«Es el pan de cada dia, diario llegan pacientes lesionados por arma de fuego (…) De dos años para acá, ha aumentado yo creo que en un 300% (…) Nosotros tenemos la obligación de salvaguardar nuestra integridad, y si llegan armados al hospital,nosotros no tenemos porque oponernos y solamente decir ¿Dónde está el lesionado?, no podemos esconder a nadie, porque en ese caso de ser sólo un herido podríamos ser varios» explicaron en entrevista en la que por razones de seguridad solicitaron el anonimato.

Cada vez que una ambulancia recoge a un paciente con este tipo de lesiones, se activa el «Código Plata» y se notifica por radio para que los médicos tengan preparado todo lo necesario para atenderle. Al llegar, se le retira la ropa y revisan las heridas. A partir de la gravedad del impacto se ordena una serie de estudios que van desde laboratorios y radiografías, tomografías, etc.

«Para tratar de salvar la vida, hay que ver dónde está la bala y si dañó órganos blanco, como los pulmones, el corazón, el hígado, los intestinos o el cráneo. Muchas veces si dan en las extremidades obvio no se mueren, pero si dan a un órgano blanco en tórax,el abdomen es más riesgoso y es cuando se les tiene que intervenir quirúrgicamente» narró el urgenciólogo.

En estos casos, es indispensable contar con un banco de sangre y un quirófano disponible por si se requiere una intervención. Lograr estabilizar al paciente puede llevar desde una hasta cuatro horas y el trabajo conlleva la participación desde tres y hasta diez personas.

El costo que ello genera, además de los insumos médicos, incluye la participación de personal médico que va desde urgenciólogos, cirujanos, anestesiólogo, médicos internistas, enfermeros y más.